¡Hola Pablo! Pues la molécula que descubrí (bueno, descubrimos, porque hoy en día casi toda la ciencia se hace en equipo) es una molécula «híbrida» entre porfirinas y ftalocianinas. Esto quiere decir que es una molécula que combina las características de las otras dos. Las porfirinas son un grupo de moléculas naturales muy importantes: son las que le dan color y función a la clorofila de las plantas y a la sangre de los animales. Las ftalocianinas son moléculas artificiales que se utilizan como colorantes (por ejemplo en los pantalones vaqueros). Nuestra molécula tiene propiedades muy interesantes (¡y un color verde-azulado muy bonito!) pero todavía tenemos que estudiarla más y optimizar su preparación para que se pueda aplicar en algo. Queremos estudiar su utilidad en campos como el tratamiento del cáncer y de infecciones (pueden matar y bacterias células cuando las iluminamos), en la preparación de placas solares (al iluminarlas pueden generar electricidad), como fuente de energía en máquinas moleculares o como marcadores fluorescentes que nos permitan ver cómo funcionan otros sistemas. ¡Hay mucho trabajo por delante! 🙂
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